- Miocardiopatía restrictiva. Consiste en que el corazón se vuelve rígido y por lo tanto aumenta la dificultad para llevar a cabo su llenado. De forma clínica, esto se traduciría en insuficiencia cardíaca con fatigabilidad, acompañado de sensación de falta de aire y síntomas congestivos.
- Insuficiencia cardíaca congestiva sistólica. La fuerza de contracción del corazón se deteriora. Al igual que la miocardiopatía restrictiva también se traduce en fatigabilidad, sensación de falta de aire y síntomas congestivos. Existe la posibilidad de que esto vaya acompañado de una angina de pecho.
- Hipotensión ortostática. Se produce como consecuencia del depósito de material amiloide tanto en vasos sanguíneos como en el sistema nervioso vegetativo. Relacionados con el esfuerzo físico o con la tensión emocional puede ocasionar mareos e incluso síncopes, siendo estos últimos la pérdida de consciencia transitoria.
- Trastornos del sistema de conducción. Pueden manifestarse arritmias, taquiarritmias (frecuencia mayor a 100 latidos/minuto) o bien bradiarritmias (frecuencia menor a 60 latidos por minuto).
(Taquiarritmias)
(Bradiarritmias)
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