Los signos y síntomas que aparecen ante un ductus arterioso varían según el tamaño del defecto. En un ductus pequeño, estas manifestaciones pueden pasar desapercibidas; sin embargo, los síntomas que presentan los niños con aberturas más grandes ya se observan poco después del nacimiento.
El primer indicio de un defecto cardíaco suele ser un soplo cardíaco en la auscultación del bebé durante un control regular.
Cuando el ductus es grande, puede provocar lo siguiente:
- Dificultades respiratorias
- Cianosis
- Soplo cardíaco: el corazón suena anormal cuando un médico escucha con un estetoscopio
- Respiración rápida
- Mala alimentación
- Sudoración excesiva
- Retraso en el desarrollo y crecimiento
- Infecciones pulmonares (neumonía)
- Cansancio
- Cardiomegalia: agrandamiento anormal del corazón
Por lo tanto, es importante acudir al médico cuanto antes si observamos algunos de estos signos en nuestro bebé.
No hay comentarios:
Publicar un comentario